Entradas

Mostrando las entradas etiquetadas como cuento

Ficción: "Uncia uncia"

Imagen
Cuando lo que más teme finalmente pasa, no queda otra cosa para el humano que desgarrar su propia piel y cambiarla. Miré los cuerpos yaciendo inertes a mis pies, su vida desparramada por toda la alfombra y pensé que no me habría imaginado cambiar tanto. No estoy segura de recordar precisamente cómo era antes de ellos, pero busco con insistencia hacerlo, creo que se lo debo a ese anterior “yo”. La costumbre de la especie dicta enterrar al muerto y eso intento hacer contándoles esta historia. Quería creer que me había tomado cien días mutar, que no había sido de un momento al otro, pero tengo que admitir y admitirme que eso es una mentira. Para mí todo cambió en un segundo, fue en ese segundo en que tomaron una decisión por mí y no después. Creo que la primer mancha, si hubiera tenido la lucidez para observar mi cuerpo desnudo y no volverme loca, la hubiera notado cuando me tiraron en el descampado. De cualquier forma puedo recordar la fuerza con la que mi cuerpo golpeó el suelo,

La Congregación

Imagen
  Una sensación arrebatadora, sofocante, se apoderó de mí apresando mi corazón, volcándolo y cerrándome la garganta. No respiraba, el aire se había escapado de mis entrañas y parecía no querer volver. Me ahogaba sin poder actuar, estaba siendo testigo de mi propia muerte. Y el dolor, ¡qué tortura!, nunca había sentido algo similar en mi vida. Era desgarrador, como si me clavasen un cuchillo y tajeasen mis órganos repetidamente pero más profundo, intenso e inevit able.   Luché, no quería. No es justo. "Basta. No, no te ablandes, no bajes los brazos ahora. No seas débil", me decía. Pero fue precisamente esa última palabra la que me devastó, ¿débil por qué? ¿Por no poder controlar la oleada de emociones que se forjaba en mi interior? ¿Porque me importaba? Entonces me entregué, cedí, me dejé invadir por una mezcla de indignación, rechazo y tristeza profunda por sobre todo. Las lágrimas, calientes igual que el ánimo de los presentes, cayeron con furia por mis mejillas y ya nada hi

Carta de una Persona Feliz

CARTA DE UNA PERSONA FELIZ A LOS ASPIRANTES A LA FELICIDAD   Queridos aspirantes a la felicidad:                 Espero estén ejerciendo a pleno su pasión por la vida y voluntad de mejorar día a día, pues esos son algunos de los ingredientes que necesitarán para crear la receta de la "pastilla de la felicidad".                    En mi experiencia, una buena dosis de sonrisa diaria, por las mañanas es el comienzo. Agradecer el haber amanecido y las cosas que tenemos y aquellas que no tenemos, ni tenemos que tener. Seguido de eso, me propondría dos objetivos, uno para lograr en el día y otro a más largo plazo. Siempre es reconfortante para nuestra autoestima darnos cuenta de que podemos lograr lo que nos propongamos y cierto es, que si nos enfocamos en algo, lo podremos realizar. Aunque claro, no debemos confundir enfoque con capricho o testarudez. Hay veces que la vida nos va mostrando que ciertas cosas no son para nosotros o que equivocamos el camino. Debemos estar atent

Microficción: La Princesa del Dolor

"Quedate conmigo", "¿Así vas a salir?", "¿Cuántos hombres te buscaron?", eran algunas de las típicas frases celosas y codependientes que el sapo le decía a la Princesa del Dolor. Ella no lo notaba, vivía de una ilusión. Creía estar con un príncipe, no con un anfibio. Él no la amaba, no podía amar, pero la necesitaba y no sabía cómo retenerla a su lado. No quería que estuviese con otras personas, especialmente si eran del género masculino. El sapo era inseguro, no se consideraba lo suficiente para la Princesa, por lo cual la encerraba en sus mentiras. Mentiras que ella quería escuchar, mentiras que no distinguía de la verdad.   Era una relación tóxica, un círculo vicioso: las ilusiones de ella, los engaños de él, una manipulación constante. Los días pasaban y cada vez sufrían más, pero la Princesa intentaba justificarlo. Pensaba que todo iba a mejorar, que sólo debía darle tiempo y ayudarlo con su amor. El Sapo no quería cambiar, era "feliz" en s

Relato: Volviendo de la Oscuridad

  Una noche confusa, luces extrañas, un cuerpo que no se podía sostener por sí solo. Policía, médicos, enfrentar la realidad, repulsión, vómitos. Finalmente resignación. Había una parte de ese cuerpo que nunca volvería a ser lo que había sido, que pasaría por los túneles más oscuros y su alma lo sabía, pero ese día había terminado, era hora de descansar. La familia y los amigos pronto se le acercarían a tratar de componerlo.   Los días comenzaban a pasar en medio de sentimientos que envolvían a ese ser en un pantano oscuro: miedo, asco, impresión, dolor, impotencia, ira, sentimiento de soledad. Su cuerpo representaba estas emociones vomitando, con dolores de cabeza y evasiones a la realidad. No había consuelo que sirviese e incluso muchos de sus bastones comenzaron a alejarse, no pudieron soportar lo que había ocurrido. Estaban en un estado de shock tan profundo que no fueron capaces de seguir ahí, de acompañar a ese alma, que pronto también tuvo que acostumbrarse a esta situación.

Cuento: Perdido

  ANTES DE DEJARLOS EN PRESENCIA DE MI CUENTO, QUIERO HACER UNA PEQUEÑA INTRODUCCIÓN A MI PERSONA: MI NOMBRE ES A.C., TENGO 20 AÑOS Y SOY LECTORA EMPEDERNIDA DESDE QUE PUDE APRENDER A JUNTAR LAS LETRAS Y DARLES UN SENTIDO. A LOS 8 AÑOS LEÍ MI PRIMER NOVELA LARGA, QUE RESULTÓ SER HARRY POTTER, HOY, MI SAGA PREFERIDA. EN ESOS LIBROS ENCONTRÉ MI REFUGIO Y TAMBIÉN MI PROFESIÓN, EN J.K.ROWLING UN MODELO A SEGUIR. EN CUANTO ME ADENTRÉ EN SUS PÁGINAS SUPE QUE ESO MISMO QUERÍA HACER CUANDO CRECIERA: ESCRIBIR. POR ENDE, AQUÍ ESTOY, INTENTANDO COMPARTIR MIS PENSAMIENTOS CON EL MUNDO.   ASÍ COMO MI AMOR POR LA LECTURA, ESTE CUENTO TIENE TAMBIÉN UNA HISTORIA ESPECIAL, LA CUAL GUARDO EN MI CORAZÓN, Y TUVO COMO RESULTADO SU PREMIACIÓN Y POSTERIOR PUBLICACIÓN EN UNA ANTOLOGÍA QUE FUE DECLARADA DE INTERÉS MUNICIPAL EN MI CIUDAD. ES UN HONOR MUY GRANDE PARA MÍ QUE ASÍ HAYA SIDO Y POR ESO LO ELEGÍ PARA SER EL PRIMER RELATO QUE COMPARTA CON UDS.   YA SIN MÁS POR AÑADIR, LOS DEJO CON "PERDIDO&qu