Reseña: A tres metros sobre el cielo, por Federico Moccia

Título:  Tre metri sopra il cielo / A tres metros sobre el cielo

Autor: Federico Moccia

Género: Literatura Juvenil-Romántica

Páginas: 416

Año de publicación: 1992 (por el propio autor), 2004 (reeditada por la Editorial Planeta)

ISBN: 84-9793-916-6

SINOPSIS

Babi es una estudiante modelo y la hija perfecta. Step, un adolescente violento y descarado. Provienen de dos mundos completamente distintos. A pesar de todo, entre los dos nacerá un amor fuera de todas las convenciones. Un amor controvertido por el que deberán luchar más de lo que esperaban.

MI OPINIÓN

  Había oído hablar del libro hace años, desde que surgió la versión cinematográfica del mismo, probablemente, aunque nunca dado la oportunidad de leerlo. La literatura juvenil romántica (sin seres mitológicos o fantásticos de por medio, al menos), no es mi género usual. Sin embargo, hace unos meses atrás, una amiga, con el corazón gigante por hacerlo, me prestó varios de sus libros y éste estaba en esa lista. Para salir un poco de mis lecturas usuales, decidí darle una oportunidad, hace una semana.

  Comencé a leerlo no del todo convencida con la idea del cliché (el chico pobre y malo, la chica buena y rica), y, tratando de llevarme con el formato de capítulos híper cortos, como lo son al principio los mismos. Aunque, claramente, al estar contando una historia con dos protagonistas, al mismo tiempo y en diferentes escenarios, es necesario esto, para crear una intriga que sea prontamente curada.

  Desde un principio, Step lograba sacarme de mis casillas. Simplemente no me iba la excusa de tener un mal pasado para comportarse del modo en que lo hacía. Quiero decir, si todas las personas que hayan pasado malos tragos reaccionaran así se levantarían guerras civiles por todas partes, o cosa parecida. Sabía que ambos se iban a enamorar y simplemente no entendía qué podría llevarla a Babi a caer en sus "garras". Por el lado de la chica, no se sabía ni mucho ni poco de ella como para que me gustase o no, me era indiferente de algún modo. Exceptuando las ocasiones en las cuales Step la hacía pasar amargos ratos, al comienzo de la novela. Allí surgía mi simpatía por ella. Una chica que se comportaba tal y cómo era esperado, aunque tal vez no como lo hubiese hecho de poder actuar libremente.

  La primera mitad del libro me pasó algo lenta, entre la vida seca de Babi y la agitada de Step, la cual, muchas veces, me hizo arrugar la nariz ante las descripciones de las peleas en las que se involucraba. No soy, como Babi, una persona que disfrute de estos episodios. De todas maneras, la novela me gustaba y estaba ansiosa, esperando ver cómo todo se iba transformando, poco a poco. A decir verdad, de parte de Babi me quedó mucho para ser explotado. No vi grandes cambios en ella a nivel persona. Es decir, sí, se rebeló a sus padres, pero no sentí que lo hiciese desde sus propios deseos, sino desde el punto en que su existencia se vio envuelta por el caótico estilo de vida de Step y sus amigos. En cambio, en el propio joven, que tanto me disgustaba, y, en parte, seguía haciéndolo a aquellas alturas, pude observar una transformación mucho más profunda. Fácil de distinguir en los pequeños detalles, en su trato para con Babi, o en haberse alejado, en cierta medida, de la vida delictiva que llevaba.

  Tengo que decir que nunca llegué a entender cómo fue que se enamoraron. Tal vez fue la insistencia de él, o lo prohibido de la relación, pero no he podido captarlo, creo que faltó descripción en ese punto. Mucho supimos de ellos por separado, antes de que estuvieran juntos, pero poco del cómo llegaron a estarlo. Digamos que es mi pendiente con la historia.

¡ALERTA!

(SPOILERS DE AQUÍ EN ADELANTE)

  Entrando en la segunda mitad del libro, me ha sido inevitable sentirme elevada A TRES METROS SOBRE EL CIELO. Allí el autor logra envolvernos completamente en la maravilla del amor juvenil, intenso, apasionado, creído interminable, admirable y bellísimo. Nos deja sin aliento una y otra vez, nos arrastra a ese mar de sensaciones que sólo se viven a esa edad y de esa manera. Es un panorama tan hermoso que, de un momento a otro, sin que lo viésemos venir (incluso si, como yo, sabías que eso sucedería porque has leído/escuchado spoilers), nos pincha el globo y caemos en picada inevitable sobre el cemento. ¡PUM! Golpe seco, sin sobrevivientes.

  Me sentí con la felicidad arrebatada el resto de la novela, como a un niño que le dan un dulce y se lo quitan antes de que lo acabe. Creo no poder describirlo de otra manera. Literales lágrimas cayeron por mis mejillas, inagotables. En severas ocasiones, tuve que cerrar el libro un momento y dejar que las mismas hicieran su camino, antes de continuar. A pesar de no haber sentido simpatía alguna por Step durante la mayor parte del libro, los pequeños gestos de amor hacia Babi habían mellado en mí, evidentemente. Muy para mi sorpresa me vi sintiendo antipatía por la joven, no entendiendo por qué lo había abandonado, ¡¿por qué no luchar por ese amor?! Simplemente es una historia tan bien lograda, que el dolor de Step me llegaba y profundo. Aunque, luego, supe entender que a pesar de sus muchos cambios, no había logrado renunciar a su violencia, que una parte egoísta o insegura suya, tal vez, seguía aferrada a ella. A eso que tan mal le hacía a Babi, eso que los separó.

  Entendiendo el por qué del final, amigada (o algo así), con ambos personajes, pero aún con el corazón acongojado, me apresuré a comenzar la continuación, para saber si allí encontraría consuelo.

  En líneas generales me pareció una historia conmovedora, con algunos puntos que no me terminaron de cerrar, pero sobre los cuáles espero saciarme en la continuación.

MI PUNTAJE: 3/5

¡Hasta la próxima! ;)

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